SOY HIJA DE MADRID LO MISMO QUE FUE MI PADRE, COMO MI MADRE TAMBIEN LO ES, EN ESTA TIERRA DE ARTE DONDE SIEMPRE VIVIRE ... EL RECORRER DE SUS CALLES, LAS CUALES NO TIENEN FIN, TE HACEN SENTIR EL EMBRUJO QUE SIEMPRE GUARDA MADRID, ... Y VENGAS DE DONDE VENGAS, LLEGUES DE CUALQUIER LUGAR, TE SENTIRAS MADRILEÑO, POR LA CALLE DE ALCALA..... Y POR EL MADRID MAS VIEJO QUE PISABAN MIS ABUELAS, PASEARAS SIN DESCANSO POR SUS CALLES Y PLAZUELAS, Y BIEN SEA DE TAPEO DE ENTRESIJO Y GALLINEJA, CHOCOLATE CON BUÑUELOS, DIRAS CON LA BOCA LLENA ...¡!! QUE DESDE MADRID AL CIELO ¡!!

Translate this blog

Buscar en este blog

jueves, 13 de enero de 2011

Las castañeras

El otoño llega Madrid cuando vemos aparecer los primeros puestos de castañas. Suelen instalarse por el mes de noviembre cuando el frío empieza a hacer mella en la ciudad. Aunque este fruto abunda en Galicia y Asturias son un símbolo capitalino en forma de puestecillo callejero.
Hace años vender castañas asadas en la calle era un oficio de mujeres, conocidas popularmente como castañeras. Hubo un tiempo en que se asentaban en cualquier esquina, plaza, zaguán o boca de metro. Sus armas de trabajo eran un hornillo, el puchero, la materia prima y una paleta para voltearlas.
Solían ser mujeres maduras y curtidas por el frío helador que en esos años era propio de los inviernos madrileños. Muchas, entradas en años, llevaban toda su vida dedicándose a vender castañas calentitas al viandante a cambio de un puñado de monedas.
Eran conocidas en los barrios donde se instalaban, representaban un elemento más de los mismos. Su apariencia era casi siempre similar: vestían de negro, con pañuelo a la cabeza, toquilla sobre la espalda, guantes para sus manos repletas de sabañones y mantas para abrigar sus cansadas piernas y ateridos pies.
Las castañeras eran figuras entrañables asociadas indefectiblemente a los preludios de la Navidad. Existen desde el S. XIX, hubo muchas muy famosas y conocidas, como una tal Geroma, que tenía su puesto en el Rastro y a veces lo trasladaba a la Puerta del Sol.
Hoy, esta imagen del Madrid de otro tiempo, se ha transformado en quioscos regentados por cualquiera que adquiera una licencia municipal. Pero lo importante es que se ha mantenido esta costumbre de poder comprar el manjar otoñal y degustarlo mientras se pasea por las calles de la capital.

Más información en “Viejos oficios de Madrid”, de Ángel del Río.
 

1 comentario:

  1. Alcancé a ver castañeras en el barrio estudiantil de
    Moncloa-Arguelles.Soy chileno,viví dos años en Madrid
    estudiando en la Complutense, y volví 50 años después
    para recorrer de nuevo la ciudad universitaria y las hermosas calles de una ciudad encantadora.

    ResponderEliminar


3D Madrid in Google Earth

GRAN TURISMO 5 MADRID GAMESCOM GAMEPLAY

MADRID protagonista en un juego simula una casi idéntica ciudad!!